El programa del depende

Por los pelos y como a empujones, el Partido Popular se ha visto obligado a presentar su programa. ¡Qué fastidio eso tan democrático de hacer públicas las propuestas de gobierno de cada cual antes de unas elecciones! Total, si en la sede nacional pepera ya dan por ganadas las elecciones sin pasar por las urnas, ¡qué incordio de tanta democracia! Están tan crecidos que quieren ganar el partido sin bajarse del autobús. ¿Para qué tantas explicaciones que puedan despertar al león dormido del voto socialista? Pasar de puntillas y con la mayor ambigüedad posible es la consigna. Luego ya vendrá el tío Mariano con las rebajas.

Así, el programa que pone sobre la mesa Rajoy no es más que una cesta de inconcreciones  y vaguedades, a la imagen y semejanza del aspirante a la Moncloa, una plasmación del peligroso «depende.» Epígrafes vacuos, anuncios solemnes y ningún detalle. Nos desvela casi nada para no pisar ningún callo y lo poco que muestra resulta preocupante. Ya ha avanzado el actual jefe de la oposición que piensa rebajar los impuestos a las rentas de capital, es decir, a los que más tienen. Si ya es criticable esa generosidad con los poderosos, aún es más grave el perjuicio que puede causar a los servicios públicos la merma de los ingresos por dichas bonificaciones tributarias. Como ocurre en las comunidades donde gobierna el PP, el tijeretazo irá a la educación, la sanidad o la dependencia. Recortes en lo público para beneficiar lo privado. Con la excusa de la crisis, la derecha quiere hacer su agosto e imponer un modelo donde la igualdad de oportunidades será una reliquia del pasado.

Foto.- Efe en El País.

Aquaria

AQUARIA
Juana Castro

Llovía largamente por todos los rincones.
Gotas dulces llovían por su espalda,
miel de venas azules el cabello,
arco ciego del mar.
Nalga rosa perdida,
húmeda luz, la clara
porosidad de nieve de sus pómulos.
Arroyos, mar, cascadas inundando
los brazos y las cuevas,
golondrina en el borde su mirada.
Líquida llueve, líquida
se sumerge en las algas
y una rosa de yodo, como una ventana
le florece en la sangre.

Un vídeo muy veraz

El Partido Popular se ha rebrincado mucho con este vídeo. No entiendo por qué tantos aspavientos. Refleja sin exagerar un ápice la realidad: la necesidad que tiene la inmensa mayoría de este país, que la derecha considera sólo suyo, de una educación pública que garantice la igualdad de oportunidades. Hoy ese derecho está en solfa por las políticas de los gobernantes del PP en las comunidades autónomas. La marea verde de la comunidad educativa de Madrid contra Esperanza Aguirre no es una ficción ni un invento del PSOE. Es la respuesta de la sociedad ante las agresiones brutales de los peperos al estado del bienestar. Y lo mismo ocurre en Castilla-La Mancha, Valencia o Galicia. Movilizaciones por doquier porque los tijeretazos de la derecha están podando nuestras conquistas. Y lo hacen a la claras y con desparpajo, no se ruborizan ni intentan maquillar su hostigamiento a los servicios públicos que necesitamos aquellos que no amasamos fortunas. El dinero de nuestros impuestos se lo quitan a la enseñanza pública y lo inyectan a la privada. Muy propio de la derecha: más para los que más tienen, aumentando la sima de las desigualdades. Nos toca defender con uñas y dientes lo que es nuestro, lo que queremos. La educación no es un negocio, es un derecho.

Un búnker para Rajoy

Es de agradecer, al menos, el aviso lanzado por los responsables de la campaña del Partido Popular. Nadie se llamará luego a engaño cuando le pongan la mordaza. Mariano Rajoy no ofrecerá ninguna rueda de prensa ni mantendrá ningún otro contacto ni oficial ni oficioso con los periodistas que sigan sus actividades en lo que queda de precampaña y campaña. Sólo podrán acceder a sus intervenciones en los actos y sin posibilidad de hacerle ningún tipo de pregunta. Este bloqueo, que no es nuevo, supone una auténtica tomadura de pelo para la profesión y para la ciudadanía. Si fuera director de un medio de comunicación, no mandaría nadie a su caravana electoral. Y me plantearía una cobertura alternativa orientada a la función social que han de cumplir los medios, lejos de la agenda, del señuelo propagandístico, que propone el equipo de Rajoy. La decisión exige una postura de fuerza tanto de las asociaciones de periodistas como de las propias redacciones. Un boicot en toda regla por la vulneración de los derechos constitucionales (el del ciudadano a recibir una información veraz y el de los periodistas a ejercer la libertad de información).

El equipo de campaña le ha montado un búnker a Rajoy. Para pasar de puntillas por los asuntos espinosos (ausencia de programa público, recortes en educación y salud, corruptelas gurtelianas, etc.) y hacer una campaña sin sobresaltos, sin elementos que le obligue a abandonar la hoja de ruta del lugar común y la insustancialidad y sin esa cosa tan molesta que son las preguntas de los periodistas. Al PP le gusta el monopolio y el control de la información, un reflejo propio del pensamiento totalitario. Sin exagerar nada, estamos ante una estafa democrática. La ciudadanía necesita saber en un proceso electoral y se hurta esa posibilidad.  Los reporteros ejercen una cierta función representativa en la sociedad como intermediarios entre gobernantes y gobernados que, desde el PP, se quiere cercenar. La petición de la Federación de Asociaciones de la Prensa de España (FAPE), a través de su Declaración de Segovia, ha caído en saco roto.

Como periodista, rechazo este tipo de actitudes, vengan de donde vengan. Espero que Alfredo Pérez Rubalcaba, inspirado por esta cerrazón informativa de su principal contrincante, no cometa el mismo error y se abra al juego democrático que supone facilitar la libertad de información.

Foto.El Confidencial.

Jaque Mato (III)

El patinazo de Ana Mato, en particular, y la machacona mirada de desprecio de la derecha nacional hacia Andaucía, en general, están en el centro de todos los debates del Parlamento de Andalucía. Ha provocado tanta indignación que la coordinadora de campaña de Mariano Rajoy ridiculice la educación pública andaluza desde la mentira que ha dado para palabras solemnes de condena y para momentos de ironía. Una muestra de esto último es la coplilla a la recurrió la diputada Araceli Carrillo para desmontar el engaño del PP, una agresión consentida y apoyada por los sumisos dirigentes peperos de esta comunidad.

COMO GATO PANZA ARRIBA

“TOS” LOS NIETOS DE MI ABUELA,
CUANDO ERAMOS CHICUELOS,
FORMANDO UN CORRO EN EL SUELO,
CUAL IMPROVISADA ESCUELA,
LE ESCUCHABAMOS CONTAR
HISTORIAS Y TRADICIONES
QUE FUERON DEJANDO HUELLA
SINTIENDO LAS EMOCIONES
QUE DE CHICA SINTIÓ ELLA.

MAS, GRACIAS A SU BUENA ESTRELLA
O… “POR LA GRACIA DE DIOS”,
OTROS GOZARON EN CAMBIO
DE PUPITRE Y CONFESOR
PARA FORMAR SUS CONCIENCIAS
Y ESO LES QUEDÓ DE HERENCIA,
COMPAREN CUAL FUE MEJOR.

UNOS SALEN PECADORES
(OCTAVO “…no mentirás…”)
POR EJEMPLO ESTÁ ANA MATO
QUE DE ‘TÓ’ ESTO SABE UN RATO
UN DÍA TRAS OTRO DÍA
YO NO SÉ CÓMO SE APAÑA
QUE VIENE ‘TOAS’ LAS CAMPAÑAS
A INSULTAR A ANDALUCÍA
AYER QUE SI “…ANALFABETOS….”
HOY “…TIRADOS POR EL SUELO…”

ANA MATO: ¿’USTÉ’ EN POZUELO…
NO SABÍA ‘NÁ’ DE UN JAGUAR
REGALADO A SU MARIDO
-TAN CABAL Y TAN CRISTIANO-
QUE OLÍA A CHORIZO PODRIDO
DE CURTIDO VALENCIANO?

Y A ‘TÓ’ ESTO JAVIER ARENAS
GUARDA SILENCIO, DISCRETO,
ME PONEN EN GRAN APRIETO…
¿CUÁL DE LOS DOS DA MÁS PENA,
LA MADRILEÑA LOCUAZ
QUE INSULTA A LOS ANDALUCES
O ARENAS QUE A TODAS LUCES
CALLA Y CONSIENTE SIN MÁS?

OTROS PREFIEREN LA ESCUELA
QUE HOY HACE IGUAL QUE MI ABUELA
Y FRENTE A TODA ESA CORTE
DEVOTA DE LOS RECORTES
YO NO ME PIENSO ESTAR QUIETO
Y EN EL SUELO, IDIOTA Y ANALFABETO,
PANZA ARRIBA LA DEFIENDO
-COMO SE DEFIENDE UN GATO-
¡ POPULARES ¡ … MAS RESPETO
Y MAS VERGÜENZA… ANA MATO.

Jaque Mato (II)

Sé de muy buena que las declaraciones de Ana Mato sobre que algunos escolares andaluces reciben clases en el suelo han sentado muy mal, a cuerno quemado, en la sede regional del Partido Popular. Llueve sobre mojado. Ya Mato metió la pata hasta el corvejón en la campaña electoral de 2008 considerando a los niños de esta tierra «casi analfabetos» y ahora vuelve a las andadas en los aledaños de unos comicios generales. De cara al exterior, las huestes de Javier Arenas han salido arropando a la coordinadora de la campaña de Mariano Rajoy en un ejercicio de cinismo insoportable. Pero de puertas adentro se han lamentado de este nuevo yerro de una dirigente que no para de meterse en charcos con esta comunidad y que de nuevo les plantea una crisis en su hoja de ruta electoral. Los despachos han aguantado los gritos y los lamentos de una organización política que no quiere que se conozca su programa electoral y que no se le caiga la careta de la impostura y los recortes antes del 20-N.

Le ha faltado valentía a los peperos andaluces para afear la conducta a su correligionaria. Estos gestos hipócritas son perfectamente percibidos por el electorado. Ya hemos hecho un máster por estos lares de tópicos y agresiones de la derecha patria y de las calladas por respuesta de Arenas. Ante una barbaridad tan flagrante no cabe otra salida que las exigencias de disculpas, que la petición de una rectificación inmediata.

O porque no puede o porque no quiere, el eterno aspirante a la Junta ha vuelto a demostrar que se pliega a las consignas nacionales de las siglas de la gaviota y nunca da la cara por Andalucía, ni siquiera en situaciones tan palmarias y evidentes. Mato ha intentado ridiculizar desde la mentira la educación pública andaluza y el PP de aquí guarda un silencio bochornoso. Se manifiesta, una vez más, una de las razones por las que Arenas no tiene (ni tendrá) el afecto de los ciudadanos de esta tierra.

Como corolario, un fragmento de la columna de Pepe Aguilar, jefe de opinión del Grupo Joly, titulada Política en los colegios:

«Contra folleto, brochazo. Como el que ha dibujado la vicesecretaria de Organización del Partido Popular -la tercera o cuarta autoridad en el organigrama-, Ana Mato, que para negar que su partido meta la tijera en los recursos educativos ha denunciado haber visto en los periódicos andaluces que «algunos niños están en el suelo en los colegios públicos porque ni tan siquiera tienen mesas para sentarse», enorme sinécdoque demagógica inventada a raíz de una fotografía del primer día de curso en un colegio en el que falló puntualmente la llegada del mobiliario.

¿Se puede ser más indocumentada, faltona y sectaria? Ana Mato ya lo fue hace tres años y pico, en la anterior campaña para las elecciones generales. En 2008, en efecto, y hablando de lo mismo, aseguró que «los niños andaluces son prácticamente analfabetos». Luego se disculpó de la forma en que se disculpan los que no tienen disculpa posible: «Si alguien se ha sentido molesto». Molestos no, señora. Indignados se sintieron todos los padres andaluces.»

Foto.Estrella Digital. Arenas, Rajoy y Mato.

Jaque Mato

Ana Mato la tiene tomada contra la educación andaluza. Para la actual coordinadora de la campaña de Mariano Rajoy, la crítica falaz contra el sistema educativo público y la comunidad docente es algo así como un patético entretenimiento. Ya en la campaña de 2008, tiró del arcaico manual del tópico y señaló que los niños andaluces eran «casi analfabetos». Ahora, con el PP acuciado por los recortes brutales en educación y otros servicios públicos fundamentales, Mato ha recurrido a la mentira para intentar desviar la atención. No ha tenido recato en asegurar que en los colegios de esta comunidad autónoma los niños recibían las clases en el suelo por falta de mobiliario, como si Andalucía fuera un país del tercer mundo.

No era por ignorancia. Ha buscado, a sabiendas que no no decía la verdad, manipular a la ciudadanía usando una foto falsa que circuló por las redes sociales y que incluso llegó a publicar un medio de comunicación. La Delegación de Educación de la Junta en Málaga emitió una nota en su día asegurando que la información no se ajustaba a la realidad y se trababa simplemente de una actividad de cuentacuentos, certificada por el propio director del centro. Pese a estos antecendentes, la ex cónyuge de Luis Sepúlveda (uno de los implicados en la trama Gürtel, el del Jaguar regalado por la banda de Correa) se ha lanzado al ruedo sin más ropaje argumental que la insidia y el engaño. Todo para tapar las vergüenzas de Esperanza Aguirre, María Dolores de Cospedal o Alberto Núñez Feijóo, entre otros, que han puesto en pie de guerra a sus respectivas comunidades educativas por los tijeretazos drásticos en la enseñanza pública. Jaque Mato: después de este sonoro patinazo, se requiere cuanto antes una rectificación. Las mentiras no pueden quedar impunes. ¿Tan nerviosos están en la madrileña calle Génova para recurrir a estas patrañas?

Por cierto, una vez más el PP andaluz, en la persona de su número dos, Antonio Sanz (en la foto, con Mato), ha salido al rescate a su compañera de filas, pese al patinazo, en lugar de dar la cara por Andalucía. El sucursalismo de la derecha andaluza es proverbial. Callan sumisamente cuando los suyos ridiculizan desde el prejuicio o la mentira a esta comunidad. Será noticia el día que den la cara por esta tierra cuando sea agredida desde su organización. Mientras tanto, Javier Arenas prefiere transigir y esconderse para evitar el bochorno. ¿Cuándo llegará el próximo insulto?

Adjunto la nota de prensa. Es larga. La clave está en el último párrafo: 20110916-nota-inicio-curso-normalizado-Málaga (E)-1

Lapidario pepero del 20-N

Esteban González Pons, portavoz y número 1 por Valencia: “No hay ningún español tan idiota que quiera al PSOE”.(enlace)

Cristóbal Montoro, ex ministro y número 1 por Sevilla:  «La gestión de la educación y la sanidad debe parecerse al sector privado». (enlace)

Javier Arenas, presidente del PP andaluz: «El PP es el partido de las reformas que evitan los recortes sociales». (Pág. 23 del Diario de Sevilla)

El primero insulta a 11 millones de votantes socialistas (¡cuántos idiotas hay en este país!) y divide a la sociedad española entre buenos y malos. El segundo nos muestra el camino que seguirá la derecha si gana el 20-N, una agenda que esconde Mariano Rajoy para no espantar a sus potenciales electores. Y el tercero miente como un bellaco, como si no viéramos lo que están haciendo sus compañeros de la gaviota en Madrid (Esperanza Aguirre), Castilla-La Mancha (María Dolores de Cospedal) o Galicia (Alberto Núñez Feijóo). La multitudinaria manifestación de este fin de semana contra los tijeretazos en las comunidades peperas deja a Arenas en evidencia.

Tiro por la culata

La Iglesia católica, como en cada proceso electoral, ha entrado en escena. Siempre lanzan un mensaje críptico, vago, confuso para los que apoyan su doctrina y que busca en el fondo dar a alas al Partido Popular. Están los obispos en su derecho de mostrar sus preferencias. Esta vez se han pasado de frenada. Para las elecciones del 20-N, los representantes del Vaticano piden el voto para aquellas opciones políticas que están contra el aborto y el divorcio. Repasando todo el arco parlamentario no hay ningún partido que reúna estos requisitos. Nadie cuestiona la ruptura del matrimonio, incluso en las filas peperas se practica con ostentación. Es que el pasaje católico de que lo Dios ha unido que no lo separe el hombre (o la mujer) no se lo cree casi nadie. La segunda parte de esta ecuación tampoco tiene acomodo en los programas electorales. Ni siquiera el PP plantea la abolición del aborto, plantea la derogación de la ley de plazos vigente para volver a la norma de 1985, la de los tres supuestos. Este exceso de ambigüedad deja a los católicos sin siglas a las que apoyar. La Iglesia católica, en su afán de virar más a la derecha todavía al PP, le ha salido el tiro por la culata.

Foto.Efe en El País. El secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal Española, Juan Antonio Martínez Camino.