Hipocresía sexual

No me produce asombro, sí cierta hilaridad y mucho hastío. Sectores conservadores están en campaña permanente con los contenidos educación sexual y afectiva que se imparten en los centros educativos públicos. Tiran de exageración, rizan el rizo de la demagogia e, intentando ridiculizar estos elementos curriculares, dejan traslucir su talante más reaccionario. ¿No será mejor que los niños y niñas conozcan estas enseñanzas de la mano de profesionales capacitados y con rigor pedagógico? Frisa con la hipocresía los aspavientos de las capas más de derechas de nuestra sociedad frente a estos contenidos reglados cuando todo un universo de información está al alcance de cualquier crío en Internet.

El último griterío de la caverna está relacionado con una guía didáctica para ¡¡¡profesores!!! sobre educación sexual. El Partido Popular se ha subido a la estela de la crítica de determinados medios de comunicación conservadores escandalizados por este manual. Un texto del programa Forma Joven en el que se tratan aspectos relacionados con la salud y los hábitos saludables de los jóvenes: alimentación, ejercicio físico, tabaco, sida, sexualidad, salud mental, drogas o violencia de género. El material está realizado por expertos en promoción de salud, conjuntamente con técnicos de instituciones (Consejería de Educación, Instituto de la Mujer, Instituto de la Juventud y la Federación Andaluza de Municipios y Provincias) y representantes de los padres y madres del alumnado. Como salta a la vista, todo muy razonable y de interés para el conocimiento de preadolescentes.

Aun así la reacción de la derecha es furibunda y trasnochada. ABC de Sevilla, por ejemplo, censuraba que se presente la «sexualidad como mero disfrute», cuando en su portada debajo de una imagen de la Semana Santa local inserta un anuncio apelando a que «el sexo es vida» (ver ilustración) o en su página 81, sección de clasificados, se leen inserciones que ofertan a 30 euros «chicas, atractivas, complacientes. Vive sensaciones nuevas t pasiones por descubrir» o «morena, guapa, buen culo». El ancho del embudo: censura para la educación sexual, vista gorda si se trata de ingresos publicitarios. En fin, puro cinismo.

 

Campañas de tráfico

La siniestralidad en las carreteras se ha reducido afortunadamente por una panoplia de motivos. Mejores infraestructuras, vehículos más seguros, la espada de Damocles de la retirada de puntos y, fundamentalmente, por la concienciación ciudadana gracias a las campañas puestas en marcha por la Dirección General de Tráfico. Sin la persistencia de este Pepito Grillo sobre los riesgos que comportan los malos hábitos en la conducción no habría caído el número de víctimas a cifras dolorosas aún pero muy bajas en comparación con un tiempo atrás. Os dejo un mix publicitario con todas las campañas de la DGT en los últimos años.

Cerco publicitario a la política

Algunos se alejan de la política como si de una apestada se tratara. Demasiadas tribunas, muchos altavoces, múltiples voces interesadas arrean con su ariete para generar el desencanto y la desafección de la ciudadanía hacia la cosa pública. Esta realidad, convenientemente aderezada por los que sólo creen en los mercados y desdeñan la regulación y el papel redistribuidor de los estados, se reviste en el mundo de la publicidad de tintes hipócritas y ribetes cínicos.

A María Gámez le han impedido en el último minuto poner una gran lona de publicidad en un edificio. La sociedad propietaria del inmueble ha vetado la instalación de la imagen de la candidata socialista a la Alcaldía de Málaga cuando ya contaba con los permisos municipales y el contrato firmado y pagado con la empresa de publicidad. María se queja con indignación y razón de este inopinado y arbitrario veto. El único argumento esgrimido es la negativa a albergar campañas políticas.

Algo parecido le ocurrió a Juan Espadas a primeros de noviembre. Al candidato del PSOE por Sevilla le denegaron unos soportes publicitarios por orden directa desde París de la multinacional Decaux, que explota distintos soportes urbanos en la capital andaluza tras ganar el concurso del Ayuntamiento. Se lanzaba una campaña de Espadas en las que se contemplaba unos emplazamientos conocidos en el argot del gremio como mupis ciudad. El pistoletazo de salida estaba previsto para el martes 9 de febrero y el viernes anterior llegó la negativa de la matriz de la exclusivista. El considerando fue idéntico al ofrecido a Gámez en Málaga: negativa a la publicidad política. Esta campaña, sin embargo, ya contaba con la aceptación de la central de compras y el visto bueno de Decaux España.

El portazo de Decaux al candidato sevillano se solventó gracias a que en la comunicación interna no figuraban los relojes-termómetros, también explotados por la misma firma, y la central de compras aprovechó con habilidad ese resquicio para colocar la campaña. Coincidiendo en el tiempo, los mupis ciudad estaban plagados de carteles con la presentación de la hagiografía del aspirante popular, Juan Ignacio Zoido, en su alocado y demagógico destino a Sevilla, con mensajes y loas a un futuro gran alcalde. Eso no fue considerado publicidad política. Vale, era una campaña de promoción de la lectura. ¡Tururú! Por lo menos, como en aquel famoso anuncio, que no nos intenten colar pulpo como animal de compañía.

En este mundo de la publicidad se dan circunstancias atípicas o, cuando menos, pintorescas. Por ejemplo, las centrales de compras por estatutos no contratan directamente con los partidos. Lo hacen a través de agencias de publicidad y así lavan sus conciencias. Las exclusivistas, por su parte, se ponen muy dignas cuando consiguen sus adjudicaciones de administraciones públicas. Ejercicios de doble moral que, por desgracia, se aceptan con normalidad en las sociedades democráticas.

Chorizos y publicidad

Buscando por la red me he topado con este vídeo. Sólo con poner «chorizos Gürtel» en el buscador de YouTube te encuentras con este spot publicitario colgado hace sólo unos días. Los anunciantes están a la que salta. Las empresas, y más en estos momentos de dificultades económicas, están con los ojos muy abiertos para encontrar un nicho de mercado. En este caso, aprovechando un reclamo de actualidad como las fechorías de la red de corrupción Gürtel por media España, esta firma ha acuñado una marca alimentaria con un poquito de guasa e ironía. Tiene toda la pinta de estar diseñada como campaña teaser. Es de suponer, por tanto, que a este vídeo le seguirá alguno más. Lo que sí estoy convencido es que al Partido Popular no le gustará en absoluto esta iniciativa comercial. A buen seguro que no probarán ni una rodaja de este suculento embutido.

Anuncio censurado

Los puritanos norteamericanos no podrán ver este anuncio entre las numerosas pausas publicitarias que financian la Superbowl de 2009 (final de fútbol americano que se jugará mañana). Los censores han metido la tijera. En este caso no les falta razón. El spot no es recomendable para la importante audiencia infantil que sigue el principal espectáculo deportivo anual de Estados Unidos. Está cargado de escenas eróticas para promocionar productos de la huerta. El mensaje es directo, los vegetarianos tienen mejor sexo, y el casting de las protagonistas parece realizado por los directivos de Playboy. Desde que hace unos años, en la final de 2004, una de las hermanas de Michael Jakcson, Janet, enseñara el pecho en una gran escandalera nacional, no dejan pasar ni una. Están ojo avizor con todo lo que rodea el acontecimiento con mayor seguimiento televisivo. Ellos, los estadounidenses, no lo verán en sus pequeñas pantallas, pero yo lo inserto aquí para compartirlo con la blogosfera. La retirada de este anuncio no hará ninguna mella a los pingües beneficios por publicidad de la Superbowl. El País lo cuenta muy con todo lujo de detalles en una información (clik).

PD.- Por cierto, hoy es el día de San Juan Bosco, fundador de los Salesianos y patrón de los publicistas. ¡Qué casualidad!