Incoherencia

Bienvenido sea el Portal de Transparencia en España. Sin duda, abrir puertas y ventanas de la gestión de lo público es el mejor antídoto para combatir a los que quieren aprovecharse de lo que es de todos y una herramienta esencial para aminorar el desencanto de la ciudadanía hacia la política. No estuvo exento el estreno de la web de dificultades de acceso y de ausencia de contenidos. La ley española de transparencia se sitúa en el puesto 64 en el ránking de los cien países que cuentan con una normativa de estas características. Se trata de un primer paso pero nos queda mucho por avanzar.

La puesta de largo del portal nos ha permitido conocer el contradiós de la tabla retributiva de la Administración General del Estado. No parece razonable que la primera autoridad de un país no sea la que más gane. Hasta 264 cargos cobran más que el presidente del Gobierno. No se aplica el principio lógico de que a mayor responsabilidad, mayor salario. Un auténtico contrasentido que requeriría una actuación inmediata para establecer un sistema equilibrado que pusiera orden en este desbarajuste. No puede ser que el inquilino de la Moncloa gane dos o tres veces menos que los responsables de las empresas públicas, un 50% menos que sus subordinados más directos o incluso que cuatro presidentes autonómicos (Cataluña, País Vasco, Madrid y Aragón). Si algo caracteriza este galimatías salarial es la incoherencia.